El cáncer es un tipo de enfermedad provocada por diferentes causas que consiste en una replicación celular descontrolada; dicha replicación y ciclo celular acelerado genera un gasto energético considerable que independiente a la causa inicial provoca la mayoría de los síntomas asociados a fatiga, deterioro de funciones y pérdida de peso presentes en esta patología. También puede caracterizarse por la aparición de tumoraciones que se forman debido a la agrupación de esa replicación celular descontrolada; sin embargo, no significa que un tumor inicial o primario sea el único lugar en el que se alojen. Existe la posibilidad de que algunas de esas células alteradas también se encuentren en circulación linfática o sanguínea y comiencen a formar agrupaciones secundarias conocidas como metástasis complicando y acelerando aún mas la evolución de la enfermedad.
Según la OMS el cáncer es una de las principales causas de mortalidad en la niñez y la adolescencia debido a el bajo porcentaje de detección temprana, tratamientos de alto costo y difícil acceso que se complican aún más en los países que se encuentran en vías de desarrollo.
Al ser una patología provocada por múltiples causas, no existen medidas realmente eficaces que permitan prevenir el cáncer infantil; esta circunstancia convierte al diagnóstico oportuno en un determinante positivo para el pronóstico cuando se recibe el tratamiento adecuado.
La mayoría de las campañas informativas se encuentran dirigidas a la identificación de los síntomas de alerta presentes en el cáncer infantil tales como cefalea intensa, fiebre persistente, dolores óseos e inflamaciones inesperadas en región del cuello, tórax, abdominal o inguinal.
Aún contando con el diagnóstico adecuado, la recepción del tratamiento en México se encuentra con diferentes dificultades ligadas a la distribución, disponibilidad farmacológica y alto costo por ciclos terapéuticos largos que suelen generar abandono al tratamiento y progresión catastrófica de la enfermedad.
Las redes de apoyo que no solamente se encuentren centradas en la familia nuclear de un infante enfermo juegan un papel muy importante para la progresión clínica favorable. En México existen diferentes comunidades y asociaciones que cuentan con planes de intervención dirigidos a los niños y sus cuidadores para disminuir cifras de mortalidad ligadas al difícil acceso a tratamientos, así como su abandono. Dichas intervenciones van desde el apoyo para financiar parte del tratamiento, contar con una estancia de recuperación post tratamiento por uno o varios días, alimentación, actividades recreativas, talleres informativos y apoyo psicológico conjunto.
Si estás interesado en participar directa o indirectamente con alguna de estas actividades te sugerimos visitar las redes de la “Casa de la Amistad para niños con Cáncer” para recibir información mas detallada y fomentar el uso de un lazo distintivo dorado o amarillo durante el mes de septiembre que representa la concientización sobre esta condición en salud en un grupo de la población altamente vulnerable: https://www.casadelaamistad.org.mx/
Luis Gerardo Vázquez Villarreal
Director Médico y Ciencias Aplicadas al Deporte LFA
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