Una de las partes más emocionantes e inclusive quizá físicas de la defensiva, sucede en la trinchera cuando se centra el balón y los linieros buscan colapsar la bolsa hasta llegar al quarterback o también conocidos como “los caza cabezas”.

Esta temporada Luis Ceniceros y Humberto Paniagua están entre los mejores cazadores del fútbol americano nacional, pero también cuentan con ciertas cualidades que los caracterizan y los hacen 100% playmakers de sus equipos.

Humberto Paniagua tiene la fortaleza junto con la agresividad para penetrar la bolsa de protección y así empezar a presionar al quarterback. Su persistencia lo hace mantenerse en el duelo y vencer a su hombre para lograr su misión. A su vez, Paniagua es garantía en provocar o recuperar fumbles, siendo parte fundamental de la defensiva.

El #93 de Gallos Negros terminó en segundo lugar en capturas con un total de 6, 3 presiones al quarterback, 15 tackleadas totales y 4 tackleadas por pérdida de yardaje; 2 fumbles recuperados y 2 forced fumbles.

Uno de los extras que hace de Paniagua algo sensacional es la entrega que tiene en los partidos, algo que pudimos ver en el Tazón México V al jugar parte de la segunda mitad con la mano casi fracturada.

Por otro lado, Luis Ceniceros posee un talento muy peculiar, sobre todo para alguien que mide 1.72 cm de altura pues no es muy común ver tanta efectividad y explosión comparado a sus demás compañeros o a los linieros que tiene enfrente.

Quizá su estatura sea el camuflaje de esa velocidad que posee para el ataque y el instinto para mantenerse siempre cerca de las situaciones donde está el balón, causando un impacto y la caída de las ofensivas.

El #55 de Mexicas terminó líder en sacks (7), 6 presiones al quarterback, 21 tackleadas, 2 tacleadas para pérdida de yardaje, 2 fumbles recuperados y un touchdown registrado. Por algo Ceniceros es favorito para llevarse el novato defensivo del año, ya que además de los stats, fue la revelación del equipo y en la liga, debido a que en partidos consecutivos su talento tuvo impacto que influyó en el marcador o en la eficiencia de la ofensiva contraria.

La línea defensiva es, probablemente, de las unidades más reñidas en cuestión del talento nacional y tener a Paniagua o a Ceniceros en el roster es garantía que generarán algún impacto en el partido, 9/10 veces que salen al campo; algo que todo coordinador defensivo quisiera tener.

¿A qué cazador te llevarías a tu equipo?

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