En la transmisión del programa del martes de LFA Total se entrevistó de forma simultánea a dos jugadores con trayectorias reconocidas en el fútbol americano del país.

Luis Trujillo y Carlos Rosado sostuvieron una plática interesante con Bruno Márquez (quarterback número 13 de Raptors) y Raúl Mateos (safety número 18 de Raptors). La temática de la entrevista fue el Tazón México III, celebrado el 22 de abril de 2018 en el estadio Ciudad de los Deportes.

En dicho juego de campeonato, ambos jugadores se enfrentaron. Bruno Márquez ya era quarterback de Raptors, pero Raúl Mateos era jugador de Mexicas, en ese entonces. La peculiaridad de esta plática, más que entrevista, fue la rivalidad que caracterizaba a ambos jugadores desde su etapa colegial cuando Márquez perteneció a Pumas CU y Mateos a Águilas Blancas.

Profundizando en lo sucedido aquel 22 de abril, Márquez reconoció la amplia desventaja con la que se presentó Raptors caracterizada por la improductividad ofensiva y la poca sincronía entre diferentes miembros del staff con el equipo. Durante esa temporada, los resultados parciales durante la temporada comenzaron a generar una ruptura interna. El enfrentamiento entre ofensiva y defensiva ante la falta de resultados, les propició desunión, descontento y escepticismo de muchos.

Confesó que no contaron con un plan de juego para el Tazón México III. Su coach se deshizo de él y todo fue cuestión de improvisación. Además, la situación empática no fue, en ningún momento de la temporada, la adecuada para que el equipo de Naucalpan pudiera conseguir una victoria que pareció que solo unos cuantos del equipo anhelaban.

Raúl Mateos explicó detalladamente varios aspectos que le dieron a su equipo, en ese entonces, una victoria muy polémica. En esa temporada, Mexicas tuvo una reacción adversa que puso en peligro su continuidad para la temporada. Una serie importante de inconvenientes, puso a Mexicas en el “ojo del huracán” durante 2018 y muy pocas personas los veía como contendientes. Esa apreciación fue el detonante más importante para que Mexicas se conjuntara de forma increíble y cada unidad se comunicara de forma indescriptible para que cada jugada enviada fuera fructífera.

El desempeño de Mexicas dependió mucho del diseño de las jugadas por los coaches. “Hicieron muy buen trabajo. Había jugadores que nunca jugaron en un estadio tan grande. El coach Rafael Duk les dio unos minutos para que salieran a ver el estadio y asimilaran la presión que el lugar mismo propicia.”

El scout realizado por Mexicas fue bien realizado, limpio y muy cuidado, y la unión del equipo fueron los elementos que diferenciaron a Mexicas de todos los demás. Podríamos decir que Mexicas 2018 no tenía a los mejores jugadores de la liga, pero lo que nadie más tuvo fue unión, dijo Mateos. Asimismo, añadió que la LFA está mucho mejor de lo que pudiera haberse esperado hace unos años. Su ausencia por un año le hizo considerar que no regresaría, tal vez. Sin embargo, ahora se han sobrepasado las expectativas al grado de que muchos jugadores de colegial están preparándose para continuar jugando, pero en LFA. “Estamos mejor preparados que los jugadores de liga mayor y eso eleva el nivel del deporte.”

La relación entre ambos entrevistados se ha dado naturalmente y cada uno entiende el rol del otro dentro del campo ahora que comparten colores.

Márquez reconoció que él y Mateos son de carácter muy similar. Y considera que esa similitud de pensamiento, carácter e intención les ha permitido ser buenos compañeros de equipo.

Mateos, por su parte, reconoce la fortaleza de Márquez para soportar la presión que implica ser quarterback. Así, la empatía entre ambos se ha contagiado a los demás compañeros de equipo y fortalecen los lazos para poder pensar en algo que produzca buenos resultados, sino es que los mejores con un Tazón México.

Por: Cinthya García Guerrero

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