Hay equipos que siempre están ahí en la competencia y sin importar lo que pase encuentran la manera de ser la piedra en el zapato que incomode a cualquier rival, esos son los Dinos desde su llegada a la LFA, no obstante, algo debe de cambiar.
La ola morada siempre tendrá la etiqueta y el mérito de ser el primer equipo que en su primer año en la LFA logra llegar a un Tazón México como fue aquel Tazón México II donde por poco le quita a Mayas la historia del bicampeón.
De ese 2017 el equipo se ha mantenido dentro de los mejores de la LFA, llegando a su segundo Tazón en el 2023, cayendo con Caudillos. A su vez, nadie va a olvidar las rachas invictas que mantuvieron en el 2020 y el 2022 cayendo en la última jornada o las 4 veces que ha hospedado semifinales y playoffs en los años recientes.
No obstante, están a dos finales perdidas de acercarse a Raptors, teniendo un gran número de apariciones en finales sin lograr campeonar y nos preguntamos varias cosas.
Hay que señalar que no es casualidad que sea Dinos y Raptors los que estén escritos bajo la misma línea en tema de tazones y rendimiento en playoffs cuando son los equipos que todavía poseen mayor número de jugadores de primera generación, así como un promedio de edad un tanto alto.
No es que no se valoren los clásicos, pero la forma en cómo se han estado moviendo las cosas en tema de velocidad y competencia, influye mucho también el tener jugadores que rindan los 4 cuartos y lo más que se pueda la temporada completa, a sabiendas que esto último también es situacional.
Por otro lado, hay que señalar que varias bajas en el equipo y un cambio de staff momentos antes y justo en el transcurso de la temporada afectó de gran manera al desempeño del equipo en temas de orden, coordinación, timing y la misma identidad de la versión 2024.
Esto dejó a Dinos en una caída radical de desempeño pues de haber puesto pie en el Tazón México el año anterior, esta vez defendieron su pase a playoffs gracias a la victoria de su último partido de temporada regular, además de terminar como segunda peor ofensiva por aire, cuarta más baja por tierra y puntos anotados.
La defensiva levantó un poco terminando como la tercera mejor en puntos permitidos, aunque tuvieron algunos problemas para contener el juego aéreo, pero sí generaron varios stops importantes, así como entregas de balón en momentos cruciales.
No obstante, una pieza que hizo falta esta temporada fue la parte de director deportivo, si bien el año pasado el equipo contó con uno y lograron elevar su potencial, siendo la parte vital para el armado y logística de un equipo en la parte deportiva.
Además, esa pieza en el equipo podría facilitar el encontrar talento que se esté en un gran estado físico atlético que genere mejores resultados y con ello, la disciplina del coach Javier Adame podría ser redireccionada.
¿Podrán limar asperezas y mejorar su pretemporada para lograr el rotundo éxito en el 2025?
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