La furia verde probablemente sea el equipo que mayor decepción ha generado en este arranque de la temporada y una parte de ello es porque la expectativa era demasiado alta semanas previas al kickoff y ¿Cómo no esperar un tremendo trabuco al tener tanto playmaker a la ofensiva? Sin embargo, el resultado no solo ha sido el 0-3 sino el cómo han llegado a esas instancias.

Uno de los puntos importantes a considerar para el equipo del Valle de México es el cambio generacional por el cual están pasando, sobretodo en la línea ofensiva. Sí son talentosos, pero eso no les quita lo novatos y lo mucho que les ha costado poder darle la protección suficiente a Bruno Márquez y si a eso le sumamos las lesiones de los más aclamados playmakers, pues tenemos como resultado una ofensiva casi o parcialmente rota.

Apenas el partido de Galgos, Márquez pudo terminar un partido, aunque eso no quita que no corrió por su vida o sufrió varios sacks a lo largo del juego. Al mismo tiempo es la primera vez en su historia que la producción ofensiva están tan pobre.

Solo 3 touchdowns por la vía aérea y 2 por tierra lo que ha producido el ataque de la furia verde.

Si nos vamos a números duros, es la segunda peor ofensiva en cuanto a números generados (43), la tercera peor en yardas aéreas (478) y la peor en los acarreos únicamente con 145 yardas. Realmente no es necesario aterrizar los números si se ha visto cada partido de esta temporada para saber que han estado teniendo bastantes problemas con el ataque

Otro de los aspectos que ha estado afectando en cuanto al tema del cambio generacional es que los líderes en campo han estado ausentes y no hay quien quiera tomar las riendas, pero que también predique con el ejemplo ¿Tema de egos? Es lo más probable que estén enfrentando.

Por supuesto no todo es caos para el equipo, ya que la unidad de la que menos se esperaba -por tantos rostros nuevos y un poco de percepción flat- ha sido la defensiva la cual ha dado un show bastante considerable permitiendo únicamente un touchdown a la ofensiva más peligrosa a la que se han enfrentado como la de Reyes o dos anotaciones al intrépido ataque de Galgos.

Han logrado hacer turnovers, que desafortunadamente para el equipo no se han concretado en puntos por la misma defensiva lo cual sería un alivio en el mismo desarrollo de juego, pero han cumplido satisfactoriamente con su papel, sin embargo no se ha logrado el objetivo grupal y no se trata de señalar culpables pues es un tema de equipo.

En la historia de la furia verde no es la primera vez que tienen arranques caóticos como lo fue en la del 2016 donde su primera victoria cayó en la tercera jornada y posteriormente llegaron al Tazón México o la vez que sí tuvieron dos victorias al hilo, pero después empezaron a acumular derrotas consecutivas en el 2018 y también llegaron al Tazón México III. Escenarios contracorriente sí han enfrentado y salido, relativamente, victoriosos.

Por supuesto que ya no es 2016 o 2018, estamos hablando de una temporada aún más competitiva y más demandante tanto física como mentalmente y sí, mucho se puedieron refugiar en que era el arranque, en que las lesiones, pero probablemente están a un juego perdido de apetar el botón de pánico o ¿Tienen un plan C en la mesa?

Aunque aún tengan que enfrentarse a algunos de los equipos que se han consolidado dentro de los mejores 5 y estén en el tiempo “suficiente” para llegar con los problemas arreglados, no dejamos pasar que el panorama se está nublando al tener una derrota contra Dinos (un top 4), Reyes (top 2) y quizá la W contra un Galgos (que podría ser top 6) era el escenario que les hubiera dado un alivio, sin embargo remarán contracorriente, aparentemente como siempre les ha gustado.

Estamos a punto de entrar a la parte media de la temporada y hay que recordar que 6 equipos en total logran clasificar a playoffs y podrían entrar a la zona floja si no logran vencer a Jefes esta semana. Un Jefes que viene de menos a más y con hambre de esa primera victoria.

¿Podrán corregirlo a tiempo? Al final si Gallos Negros logró lo impensable el año pasado quizá Raptors sea la historia que estaremos contando más adelante de lo que nadie nunca imaginó. Solo será cuestión de tiempo a que ellos mismos nos indiquen qué equipo son en realidad; el que lo intentó, pero no lo suficiente o el que logró poner las prioridades del equipo por encima del propio.

Se abren apuestas.

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