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La labor de los linieros ofensivos es muy importante y, aunque a veces parezca muy difícil evaluarla, siempre habrá quienes aportan ese ‘extra’ que puedan faltarle al equipo. La historia de Michell López es un reflejo de lo que produce el talento nato y disciplina.

El principio de la trayectoria de Michell en el fútbol americano fue a los 15 años en Vaqueros de la prepa 2 de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Después de haber jugado fútbol desde pequeño, una lesión lo orilló a ser liniero ofensivo.

“Siempre me ha gustado el soccer, pero en la cuestión de la práctica me enamoró el football por todo lo que transmite: responsabilidad, respeto. Todo me envolvió bastante” -comentó.

Solamente 2 temporadas fueron suficientes para que los entrenadores vieran el potencial de Michell por lo que le llamaron para jugar en la categoría juvenil de Auténticos Tigres en 2009; equipo en el que estuvo hasta su último año de liga mayor.

En su recorrido de estudiante-atleta Michell tuvo 2 campeonatos en la Vocacional, 1 campeonato nacional en juvenil y 2 bicampeonatos en Auténticos Tigres (2011-2012 y 2015-2016). Además, formó parte de la selección mexicana en el Mundial Universitario 2016 consiguiendo la medalla de oro.

“No esperaba llegar tan pronto a Auténticos por el hecho de haber entrado a los 15, pero a los 18 ya estaba en liga mayor y a los 19 viví el primer campeonato con Tigres en un estadio a máxima capacidad contra los Pumas de Ciudad Universitaria. De todos los campeonatos he disfrutado y aprendido cosas, pero 2015 me marcó más por haber regresado de una lesión que me dejó dos años sin actividad” -añadió.

Después de haber vivido grandes momentos con Tigres, Michell tenía claro que quería seguir jugando y qué mejor que aportar su “granito de arena” para que el proyecto de la LFA siguiera creciendo. Fue en 2018 cuando Dinos de Saltillo hizo su primera selección del Draft y llamaron al liniero ofensivo Michell López.

“¿Por qué no poner un “granito de arena” a esto que nos gusta y transmite enseñanzas? Lo que me gusta de Dinos es que la gente es apasionada por su equipo. Cada que jugamos el estadio se ve con mucha gente y eso es algo bueno. Cada año aumenta el nivel de la liga y la gente está más motivada.”

Además de ser jugador, Michell también se ha desarrollado como coach de infantiles y en la Facultad de ingeniería, mecánica y eléctrica (FIME) con el objetivo de transmitir valores a los más jóvenes.

Sus resultados y sus experiencias solo reflejan la calidad de persona que es y su deseo de poner su “granito de arena” para que las cosas crezcan no solo en la liga o en Dinos, también en su día a día con las personas que lo rodean.

Por: Fernanda Mayen

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