Este fin de semana de fútbol americano fue cómo ningún otro, una vez más este deporte nos demostró cada segundo y cada yarda cuentan hasta el momento en que se acaba el reloj de juego. Hubo mucha expectativa generada en torno a las finales de conferencia y cualquier pronóstico previo al día de ayer se diluyó con la patada inicial.
La final de la Conferencia Americana tenía como favoritos a los Jefes de Kansas City sobre los Bengalíes de Cincinnati, y por los primeros dos cuartos parecía que el pronóstico se cumpliría con Patrick Mahomes conectando con Travis Kelce y Tyreek Hill constantemente. Con el marcador 21 a 3 y con menos de un minuto por jugar la ofensiva de Cincinnati respondería con un pase pantalla de 41 yardas a Samaje Perine que conseguiría poner el juego 21-10.
Para el tercer cuarto Joe Burrow y los Bengalíes saldrían a demostrar por qué llegaron a esas instancias y remontarían para poner el marcador 24-21 a su favor con poco tiempo en el reloj de juego, los Jefes no renunciaron y lograron llevar el juego a tiempos extra con un gol de campo de Harrison Butker.
De nuevo parecía que la historia de hace una semana se repetiría cuando los Jefes ganaron el volado, pero no contaban con una gran jugada defensiva de los Bengalíes que conseguirían interceptar a Mahomes, dando la oportunidad a su ofensiva de darles el pase al Súper Tazón. La defensa de los Jefes se veía cansada y el embate ofensivo de Burrow, Chase y Mixon llevó a Cincinnati a zona roja para que Evan McPherson pusiera el gol de campo con el que los Bengalíes regresan al Súper Tazón tras más de 30 años de ausencia.
Poco tiempo después dos rivales divisionales se verían las caras por tercera vez en el año para definir al campeón de la Conferencia Nacional, 49’s y Carneros una vez más, los dos partidos de temporada regular habían sido victoria para San Francisco pero los Carneros querían ser el segundo equipo consecutivo en jugar el Súper Tazón en su estadio local.
Ambas defensivas no cedían mucho terreno y se notó con un primer cuarto sin puntos, para el segundo cuarto sería el equipo de Los Ángeles quien daría el primer golpe con una anotación más entre Matthew Stafford y Cooper Kupp, rápidamente responderían los 49’s con Deebo Samuel para empatar el marcador a 7 puntos; pero sería Robbie Gould quien cerraría los puntos de la primera mitad para darle la ventaja a San Francisco 10-7.
El inicio del tercer cuarto fue apretado también, con dos de las mejores defensivas de la temporada cerrando todos los caminos posibles, hasta que “Jimmy G” logró encontrar a George Kittle para poner la pizarra 17-7 y San Francisco ya soñaba con una estadía más larga en Los Ángeles, pero de nueva cuenta Kupp y Stafford se conectaron para poner el juego a un gol de campo de distancia, mismo que conseguirían con casi siete minutos en el reloj de juego.
No sería hasta la pausa de los dos minutos que los Carneros se pondrían adelante en el juego otra vez con tres puntos más de Matt Gay, los 49’s tendrían una serie ofensiva más para tratar de llevar el juego a tiempos extra pero Garoppolo bajo presión lanzaría un pase que rebotaba en las manos de su corredor y terminaría siendo interceptado. Dando a los Carneros el pase al Súper Tazón LVI.
Por lo que finalmente el 13 de febrero conoceremos al nuevo campeón de la NFL. ¿Serán los aguerridos Carneros de Los Ángeles el segundo equipo en ser coronado campeón en su casa, o podrán los Bengalíes de Cincinnati romper la sequía y levantar por primera vez el trofeo Vince Lombardi? En solo dos semanas conoceremos el desenlace de esta temporada; pero antes tendremos una pequeña parada en Las Vegas para el Pro Bowl el próximo domingo.
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