Este domingo 9 de abril los Fundidores de Monterrey reciben a los Mayas, en el último partido de temporada regular de la LFA.
Además de que la escuadra de Monterrey busca su pase a semifinales, el partido tendrá el ingrediente especial de que será el último partido profesional que se jugará en el Estadio Tecnológico antes de que sea demolido para dar paso a un complejo deportivo.
El Estadio Tecnológico fue inaugurado el 17 de julio de 1950 por el presidente Miguel Alemán Valdés. Ese día 12,000 aficionados presenciaron un evento ecuestre con el jinete Humberto “Mariles” Cortés, aunque su propósito era ser casa del equipo de fútbol americano del ITESM.
Posteriormente, el 2 de agosto de 1952 los Rayados jugaron su primer partido oficial, un duelo que perdieron por 3-1 ante Veracruz.
Ahora tocará al equipo de Fundidores escribir el último capítulo en la historia del Tec, situación que se vuelve más emotiva debido a que Coach Polo y varios miembros del equipo formaron parte de los Borregos.
Cabe recordar que en ese inmueble se escribieron grandes historias del deporte de Monterrey.
LosRayados de Monterrey consiguieron ahí el campeonato en el torneo México 1986, el título de Copa en 1991, la corona del Torneo Apertura 2010 y la Liga de Campeones de la Concacaf 2012-2013.
El estadio también fue una de las en la Copa del Mundo México 1986 y ahí se disputaron los partidos de la selección de Inglaterra ante sus similares de Polonia, Portugal y Marruecos.
Además, bajo el mando del coach Frank González, los Borregos Salvajes del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) lograron cuatro títulos en la Liga Mayor de la ONEFA que fueron en Finales contra los Auténticos Tigres de la UANL, en los años 2001, 2002, 2005 y 2008.
Mario Soto, primera selección del Draft 2017 para Fundidores y exborrego salvaje, señaló que ese Estadio le trae “gratos recuerdos, si no es que los mejores recuerdos de mi vida”.
Soto fue campeón con los lanudos como jugador en 2009 y 2011, además de que entre 2014 y 2016 se desempeñó como entrenador de su alma mater.
“Mi casa es el Estadio del Tec y es una increíble coincidencia y algo muy bonito que ahora como profesional con Fundidores me toque ser parte de la historia y cerrar las puertas del fútbol americano en el Tec. Y qué mejor que con una victoria para calificar a las semifinales”, señaló Mario Soto sobre lo que representa para él jugar el último partido oficial en el Estadio Tecnológico antes de que sea derrumbado.
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