AUTOR: SERGIO MANCILLA Luego de participar con los Tigres del CCH Sur de la UNAM, Marco Antonio García cambió de aires hasta el norte de la ciudad para jugar con Burros Blancos del Politécnico en Liga Mayor. Tras la salida de Ernesto Alfaro, Marco García llegó a las Águilas Blancas buscando consolidar su carrera como […]
AUTOR: SERGIO MANCILLA
Luego de participar con los Tigres del CCH Sur de la UNAM, Marco Antonio García cambió de aires hasta el norte de la ciudad para jugar con Burros Blancos del Politécnico en Liga Mayor.
Tras la salida de Ernesto Alfaro, Marco García llegó a las Águilas Blancas buscando consolidar su carrera como quarterback, aunque estudiar en la UNAM nunca fue distractor para seguir con sus propósitos como jugador.
Marco terminó la carrera en Ingeniería Macatrónica con 9.4 de promedio lo que lo trajo de vuelta de España cuando planeaba jugar con Osos Rivas para esta temporada.
“Estuve casi un mes con ellos, quienes me arroparon como una familia”, comentó Marco García quien tuvo que volver a España para iniciar la maestría en Sistemas Mecatrónicos debido a que terminó en verano pasado la carrera y tenía que continuar su proceso de titulación en la UNAM.
A la par de la Ingeniería, el quarterback de Mayas se encuentra en el sexto semestre de Física, carrera que continuará el próximo semestre con 9.5 de calificación.
Su percepción de la LFA cuando jugaba su último año de elegibilidad con Águilas Blancas era positiva, “estaba contento con compañeros y coaches, con todo el arraigo de Liga Mayor que es muy importante y ves a los aficionados emocionados con el Super Bowl, necesitábamos esto”.
Marco García se reencuentra ahora con rivales que tuvo hace unos meses en la ONEFA, como es el caso de Omar Cojolum quien fuera corredor con los Linces de la UVM.
“Con España cambiaron los planes, pero estoy emocionado de regresar y ver jugadores con los que competía en el campo como rivales y que eran iconos en sus equipos”, declaró el quarterback.
Sobre lo que representa la LFA comentó que “el coach Alfaro no quería entrenar algún equipo de master, esto demuestra la óptica que hay de la LFA, esto es de otra manera con la gente que está trabajando en la Liga, Son proyectos serios y la exigencia es máxima”.
Marco quien aprendió a lanzar el balón desde muy pequeño gracias a su padre, recuerda que el futbol americano le ha dado “muchas satisfacciones y experiencias incomparables, realmente me ha dado disciplina y tengo una familia en este medio”.
A sus 26 años de edad Marco García buscará una ofensiva explosiva junto a Ernesto Alfaro, “el primer objetivo era no ser un conjunto de jugadores, sino un equipo, ya dimos el primer paso y el sistema de juego está ya establecido”.
Con esa confianza busca iniciar temporada ante Raptors el próximo domingo 21 de febrero a las 11:00 Horas en el Estadio Jesús Palillo Martínez en el que será el juego inaugural de la temporada.
Foto Mario Castillo
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