El jugador de 41 años defenderá los colores de Condors

Hablar de Condors hace que se tome como referencia a aquellos Cóndores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), pues es bien sabido que el equipo perteneciente a la Liga de Futbol Americano Profesional (LFA) está inspirado en aquel legendario equipo.

En esta temporada muchos son los jugadores provenientes de la UNAM que juegan en el equipo, otros más provenientes de Águilas Blancas, Centinelas, Linces UVM y otros equipos, que han oído hablar de Cóndores, por sus familiares, e incluso algunos tienen algunos que jugaran para este equipo.

El caso que más llama la atención es el del jugador Jorge Carenzo que a sus 41 años y después de 28 años, 33 temporadas, más de 500 partidos, 3 operaciones, un sin número de golpes, torceduras, esguinces, luxaciones, fracturas e infinidad de dolores (contado por el mismo) quiere seguir jugando y defender los colores de Condors.

Con respecto a la idea de jugar ahora en Condors y si algo de este nuevo equipo le recuerda a los Cóndores de la UNAM Jorge menciona, “para mí jugar ahora en Condors, que sin ser un secreto su origen está en los

Cóndores donde tuve la fortuna de alcanzar a jugar en liga mayor, para mí es un honor y un privilegio porque soy el único en tener esa fortuna y porque es darle continuidad a ese gran equipo, lamentablemente los últimos años de los cóndores no fueron los mejores y los primeros de los Condors tampoco lo han sido, pero algo que tenían aquellos extintos Cóndores y que creo tienen ahora estos Condors o la idea es que así sea y es algo en lo que a mí me gustaría aportar, es pasión, es entrega, es orgullo, es dejar todo en cada partido, obviamente que lo que nosotros buscamos es ganar, para eso nos preparamos y estamos aquí, pero para ganar hay que entregarse, hay que sacrificarse y eso es lo que estamos haciendo, pero hay algo más allá de las victorias”

A pesar de tener más de 41 años y una amplia experiencia como jugador, el Linebacker de Condors aún se pone nervioso antes de cada partido, siente la adrenalina cuando están a punto de anotarles, sufre con sus compañeros cuando les anotan o no logran anotar porque como el menciona “es un orgullo defender un equipo, unos colores, una historia y entregarlo todo por un mismo objetivo con otros 60 locos igual que uno; porque el futbol es mi vida”.

“A estas alturas mi capacidad de juego no es la misma que cuando jugaba liga mayor, pero si la misma intensidad, las mismas ganas, la misma entrega en cada partido y la misma satisfacción de estar dentro de un campo de juego, ser parte de un equipo, sentir y vivir el futbol.”

Jorge también comenta que el americano no solo es un deporte, pues también le sirve para distraerse un poco con sus compañeros de equipo y olvidarse de los problemas “ahora las prácticas son menos exigentes, es menos tiempo y menos días, pero suficiente para olvidarte de toda presión o problemas del trabajo, la familia, deudas o lo que sea; tiempo para estar con tus amigos, viejos y nuevos; para repetir una y otra vez las anécdotas de siempre y volver a morirse de risa; para ver cualquier error o defecto del de al lado para cargarle pila; para reírnos de los males que nos embargan a todos; para decir tonterías y que te las festejen, la banda del americano es la única que te soporta y celebra las idioteces por las que en cualquier otro lugar ya te hubieran hecho a un lado. “

A su edad muchas personas le han preguntado el significado o la importancia de seguir jugando, para la respuesta es clara “cuando te alejas del americano no tienes donde sacar todo lo que haces en él, así que si todavía puedes hacer un par de tackleadas ¿Por qué no seguir jugando? Y si ya no puedes hacer ninguna ni correr la bola, no importa, el futbol es tan noble que te deja pertenecer a un equipo y vivir lo mismo sin importar que tan bueno o malo eres como jugador, no es lo mismo estar en las gradas que equipado en el campo”, platica Carenzo.

Sobre la oportunidad de pertenecer a Condors, para Jorge mas que tener la oportunidad de ser un jugador profesional significa, “para mi es el último tren, la última y nos vamos, atreverse a pesar de las burlas de unos, la incredulidad de otros y el desánimo de muchos, no sé si lo logre, no sé si mi cuerpo me aguante, pero confío en que cuando el cuerpo ya no pueda, me sostenga el amor a este juego, la pasión de jugarlo, el alma Puma de adentro y 33 años de historia detrás y si, también el coraje y un par de… que me han ayudado a suplir el músculo que siempre me ha faltado, pero que me ayudaron a ser y seguir siendo para muchos el Capitán”, puntualiza Jorge.

Carenzo (como coloquialmente le dicen dentro del equipo) debuta en esta temporada 2018 como jugador, en las dos temporadas anteriores fue coach del equipo por lo que agradece al Coach Félix Buendía de darle la oportunidad de jugar y ser el único Condor que jugó en los Cóndores.

Por ultimo agradece a todos los coaches que formaron parte de su historia como jugador y a quien lo ha apoyado en toda su carrera deportiva, “gracias a los coaches que me dejaron tanto y a todos los jugadores con los que he jugado y he enfrentado; Diego Leonardo García Miravete, Manuel Lara, Gerardo Orellana, Arturo Alonso Escobar, Leopoldo Vázquez, Manolo Rente, Jorge Carbajal Gutiérrez, Emilio Meyran, Luis García, De La Garza Tadeo, Dieguito García, Ricardo Peña y tantos más.

Nuevamente gracias al Head Coach Félix Buendía, a mi coach de posición Brandao Ramírez y al coordinador defensivo por la oportunidad, por atreverse a dejarme en lugar de algún chavo, sepan que hasta que el cuerpo aguante ahí estaré, Old School (jaja) demostrando que no se equivocaron, que aunque me paré lentamente, en cada jugada dejare todo en la cancha y seré como alguien me dijo “como Rocky 6”. Gracias a mi esposa por su apoyo y a mis hijos que me dan fuerza. Gracias al Licenciado Hazael y a la Licenciada Ana Paola que son mis jefes y me dan la oportunidad de salir temprano los días de práctica”.

“Gracias a todos los equipos que me dejaron ser parte de ellos. Gracias a todos los que han contribuido a cumplir este sueño”, finalizó Carenzo.

Por: Mariana Bonifaz

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